viernes, 14 de diciembre de 2012

Celebrar la navidad es vivir la SOLIDARIDAD

 Con la festividad de Cristo Rey del universo hemos terminado el año litúrgico y empezado un nuevo año con el primer domingo de Adviento, iniciando este tiempo de esperanza que es el adviento y que nos prepara para la gran fiesta de la navidad. En Navidad  celebramos la solidaridad suprema, Dios se hace uno de nosotros, toma nuestra misma naturaleza humana para que nosotros podamos acercarnos a su divinidad. El ser humano busca ser como Dios a costa del poder, de subir, de tener pero nunca lo ha conseguido por ese camino. Solo  cuando Dios se ha abajado tanto que ha compartido nuestra misma vida ha sido posible que el hombre se acercará a Dios. Por eso en Navidad, mirando al niño-Dios en el pesebre aprendemos cual es la verdadera solidaridad a la que estamos llamados los cristianos. No se trata solo de dar algo que nos sobra, de hacer una chocolatada para tranquilizar nuestra conciencia, sino de darnos totalmente al hermano, compartir la vida de los más pobres, hacer nuestros sus gozos y esperanzas así como sus tristezas y angustias como nos decía el concilio Vaticano II (Constitución “Gaudium et Spes”, los gozos y las esperanzas) del que estamos celebrando su 50 Aniversario. El papa Benedicto XVI ha convocado con este motivo el año de la fe regalándonos una preciosa carta apostólica “Porta Fidei” ( La puerta de la fe) donde nos invita a vivir 2 un tiempo de gracia y de compromiso por una conversión cada vez más plena, para reforzar nuestra fe en El y anunciarlo con alegría al hombre de nuestro tiempo” (Porta Fidei nº1). Entre las orientaciones  que el Papa nos da para vivir este año de la fe está el vivir la caridad como fruto del encuentro personal con Cristo pobre. Para Benedicto XVI la fe y la caridad no se pueden separar pues “la fe sin la caridad no da fruto y la caridad sin fe sería un sentimiento constantemente a merced de la duda. La fe y el amor se necesitan mutuamente”. La navidad es tiempo propicio para vivir esta relación de fe y caridad porque mirando al niño pequeño y débil en el pesebre nos llenamos de ese amor que irradia y nos impulsa a socorrerlo cada vez que se hace nuestro prójimo en el camino de la vida. Solo viviendo así la fe unida a la caridad podremos mirar con esperanza a nuestro compromiso en el mundo porque “esperamos  unos cielos nuevos y una tierra nueva en los que habite la justicia”. Por eso si queremos vivir una navidad autentica, tiene que ser una navidad solidaria y para ello tenemos que prepararla bien durante este tiempo de adviento reavivando nuestra fe, que se autentifica en la caridad y es creadora de esperanza para tantas personas sumidas en la desesperanza en el camino de la vida. Que la mirada profunda al niño-Dios nos lleve a descubrir a Dios encarnado en los más débiles (niños, enfermos, marginados, pobres) y les transmitamos la esperanza que comunico María a su prima Isabel de tal manera que en el encuentro con Cristo a través nuestro puedan saltar de alegría y podamos proclamar la grandeza del Señor porque ha hecho grandes cosas en nosotros.  

P.JOSE LUIS CALVO VICENTE



 COMUNICACIÓN.

·         Con los niños que asisten al refuerzo en la capilla Santa María Reina y en el centro Santa Rosa durante el mes de Diciembre tendremos algunas celebraciones, especialmente el 16  y 23; luego continuaremos con actividades a partir de la tercera semana de Enero de 2013; con vacaciones útiles, ya les comunicaremos los días y hora.

·         Informamos que tendremos dos semanas de receso de todas las actividades que realizamos en el Centro Santa Rosa, del 25 de diciembre al 6 de enero de 2013. A partir del 7 de enero continuaremos con todos los talleres que se realizan en la actualidad y nuevas propuestas para continuar organizándonos en la búsqueda de mejorar las condiciones de vida y generar alternativas de desarrollo integral.

 
AGRADECIMIENTO
Agradecemos a todos los que traen su ofrenda en víveres los primeros domingos de cada mes, con su aporte generoso seguimos contribuyendo a mejorar las condiciones alimentaria de algunas familias de nuestros asentamientos, los cuales son extensos y tienen muchas familias que carecen de lo básico, para vivir con dignidad.

Los  niños son los que más sufren la carencia de alimentos, esto hace  que vayan creciendo en un grado de desnutrición que les afecta su rendimiento escolar y desarrollo motriz. Por esta razón se hace necesario continuar trabajando para que nadie pase el día sin tener alimento, especialmente en este tiempo de unidad y fraternidad que celebramos el nacimiento de Jesús.

 

Ayúdanos a ayudar.  La caridad es cosa de todos.

1 comentario:

ELPROFE7 dijo...

VIVIR LA VERDADERA NAVIDAD
¿CÓMO?
http://elprofe7.blogspot.com/2012/12/celebremos-la-verdadera-navidad.html